El Líder Sabio

“El Líder sabio: principios bíblicos de liderazgo cristiano”, es un libro que en sus trece capítulos muestra las características que un líder cristiano debe de poseer. El Pr. Alejandro Bullón, autor de este magnífico material, ha ilustrado en sus páginas con un lenguaje sencillo pero directo y profundo, el concepto de un verdadero líder, sus características y las cualidades que todo líder debe de poseer.

El mundo necesita de líderes, pero de líderes sabios. Todo el mundo anhela en el fondo de su corazón ser un líder, y no está mal en querer serlo, si mis motivaciones son las correctas no hay nada de malo en desear liderar. Sin embargo, no basta con querer ser “un líder”, tenemos que querer ser un “líder sabio”. La sabiduría es la primera característica que alguien que desea liderar debe de buscar obtener; y la sabiduría no se obtiene de este mundo, la sabiduría se obtiene de Dios, ya que es un don divino que el Señor concede a los que lo buscan con sinceridad y humildad de corazón.

Esta idea la podemos ver claramente en el episodio de la vida de Salomón cuando es nombrado como rey de Israel. La historia bíblica narra que un día el Señor se le apareció en sueños a Salomón y le dijo que pidiera lo que quisiera porque Él se lo concedería. Salomón, pues, pidió un corazón con “mucho entendimiento” para gobernar al pueblo y para discernir entre lo bueno y lo malo (1 R 3:2-9).

Un “corazón con mucho entendimiento” es un corazón “sabio”, con “sentido común”, “equilibrio”, con “prudencia” y “buen juicio”. Es decir, sabiduría, en el entender de Salomón, no es solamente la suma de conocimiento, sino la habilidad para usarlo.

Es por eso, que un líder tiene que buscar incansablemente la sabiduría, ya que ella lo capacitará para enfrentar con equilibrio, las vicisitudes de la vida. Entonces, surge la pregunta: ¿cómo obtener sabiduría? Hay múltiples respuestas que pueden saltar a la vista, pero las más comunes son: la sabiduría se obtiene por el grado académico que uno ostenta tener, la sabiduría se obtiene por la edad que se tiene y la sabiduría tiene que ver con el puesto o cargo que uno posee. Estas tres respuestas no son más que unos mitos. No se es más sabio por ser un magíster o doctor; lo único que los conocimientos hacen, es ayudar a la persona a tener mejores condiciones para desarrollar la sabiduría. Tampoco la sabiduría tiene que estar relacionada con la edad; se puede ser anciano y no haber aprendido nada durante toda la vida; así como que se puede ser joven y haber aprovechado la vida para aprender y desarrollar la sabiduría, todo dependerá la manera en cómo hemos vivido y aprovechado la vida. Asimismo, no porque uno sea presidente, director o tenga algún cargo se le considerará sabio, el cargo no tiene nada que ver con ser sabio.

Por lo tanto, ante la pregunta ¿cómo obtener sabiduría?, la respuesta es más que obvia: solo se obtendrá sabiduría de Dios. La sabiduría es un don que viene del Señor y se relaciona con la obediencia a las enseñanzas divinas. Es decir, la sabiduría tiene que ver con el respeto y obediencia a Dios. Busquemos sabiduría en el Señor, para ser felices y ser líderes que honren el nombre de Dios. En conclusión, “el principio de la sabiduría es el temor de Jehová” (Pr 1:7).